Desde la entrada, sentirás el cambio, el aire fresco acaricia tus mejillas, y los sonidos de la naturaleza —el crujir de los árboles y el canto de las aves— te dan la bienvenida. Así comienza la experiencia en la Reserva La Mákina, un lugar único para conectar con la tranquilidad y la aventura.
¿Dónde está ubicada Reserva La Mákina?
Este santuario ecológico de 226 manzanas está en el kilómetro 58 de la carretera Diriamba–La Boquita, en Carazo. Es un destino ideal para el ecoturismo en Nicaragua, perfecto para visitar en familia, con pareja, amigos o incluso en solitario.
Aventura en las alturas

La aventura comienza en las alturas, diez plataformas y seis cables cruzan el bosque, cada una te hará experimentar diversas sensaciones entre temor, admiración y calidez mientras agarras velocidad, apreciaras vistas espectaculares, una de ellas es la del río, donde sobresale el verde de la naturaleza, un espectáculo que nos recuerda de donde venimos.
Senderismo y conexión con la naturaleza
Llegó el momento de caminar, entre árboles y hojas que guardan historias, puentes colgantes, relatos del guía, los senderos inclinados pondrán a prueba tu resistencia, te vas adentrando a otro mundo, aquí se respira paz y tranquilidad, tu cuerpo entra en un estado de relajación y autocomplacencia que solo la naturaleza da.
Los senderos más famosos son Mirador del Indio Desnudo, donde se asoma el océano Pacífico como una postal. En el Sendero de los Farallones, las rocas parecen guardianes antiguos.
La cascada y el río La Trinidad

Después de experimentar tantas sensaciones, es hora de tomar un descanso, y que mejor que hacerlo en las aguas de la cascada. Esta nace del río La Trinidad que atraviesa la reserva como la vena principal, y lo más sorprende es que no importa la época del año, siempre hay agua. Otra de las actividades que tenes que hacer, sí o sí, es conocer el río en kayak.
Gastronomía típica nicaragüense
Al mediodía, la parada obligatoria es el restaurante. Allí podrás probar la auténtica comida nicaragüense: desde las tradicionales carnes asadas, sopas y tajadas con queso, hasta el inseparable gallopinto, acompañado de una gran variedad de platillos que resaltan ese sabor característico del campo.
Camping y fogata bajo las estrellas

Para quienes buscan prolongar la aventura, la experiencia se completa con el camping: carpas cómodas, colchones, ropa de cama y hasta mesitas para que no falte nada. Pero lo que realmente conquista el corazón es la fogata, con historias compartidas, el murmullo de la cascada y el cielo estrellado como techo.
La Mákina, es sinónimo de conexión con nuestras raíces, de recargar energía, respirar diferente y recordar que la naturaleza es parte de nuestra esencia. Es aventura, calma y aprendizaje, todo en un solo espacio.